NUEVA ALAMEDA PROVIDENCIA
PASEO CÍVICO METROPOLITANO
Nuestra propuesta se basa en vincular los nuevos requerimientos de este corredor de transporte en el eje Alameda-Providencia con la importante historia cívica y el carácter patrimonial que ha tenido este lugar para Santiago, creando en el proceso una nueva identidad a partir de la integración de sistemas de infraestructura, arquitectura, ecología y espacio público. Buscamos integrar, a través de una visión unitaria y sobria, los distintos tipos de flujos de convergen a lo largo del corredor. El elemento unificador es la materialización de un paisaje urbano en que confluyen distintas líneas de transporte, formas de escurrimiento, infiltración y reciclaje de las aguas y el movimiento de las personas. En síntesis, la vida cívica.
La intervención permite repensar y optimizar el uso de los espacios públicos, concentrando el corredor dedicado de autobuses en el centro y destinando una superficie compartida para peatones, ciclistas, vehículos privados y usuarios de transporte público, creando amplios espacios y equipamiento público tales como paraderos de autobús, maximizando el uso del espacio.
De esta manera se integran los flujos existentes y propuestos para convertir el principal corredor de transporte de Santiago en una explanada lineal, un Paseo Cívico Metropolitano, como lo concibió O’Higgins en el siglo XIX: un “campo de la libertad civíl, un espacio para la ciudadanía”. (Entrevista a Miguel Laborde, Bifurcaciones, 2003)
La estrategia de diseño busca reorganizar los flujos de acuerdo a sus velocidades y prioridades para asegurar el movimiento eficiente del transporte público y al mismo tiempo despejar amplias superficies peatonales que permitan crear espacios públicos de buena calidad a lo largo de todo el eje Alameda- Providencia. Este espacio público está caracterizado por dos atmósferas opuestas y complementarias: por una parte se propone una avenida arbolada en todo su ancho que produce un túnel vegetal y un ambiente marcado por el follaje y las sombras. Por otra parte se propone despejar extensas superficies para revelar lugares notables, monumentos y edificios patrimoniales que marcan el desarrollo de este eje urbano. Los flujos de transporte, arborización y escurrimiento de aguas se organizan en cada sección del corredor para responder a las condiciones del contexto buscando la facilidad en las líneas de movimiento y también la consolidación del espacio público a lo largo del corredor.
De este modo, proponemos la recuperación histórica, infraestructural, climática y paisajística de la Alameda como eje principal y espacio público en Santiago, junto con una estrategia eficaz de transporte e integración de flujos que responden a las condiciones actuales y futuras de esta avenida principal.